Jornada del 19 de noviembre en el Festival de Teatro de Occidente.

Relaciones mediáticas y segundas miradas.
Alberto Ojeda


Una propuesta sin artificios pero equilibrada, coherente y profunda fue lo que la agrupación “Solo por hoy”, proveniente de Argentina, nos presentó con la obra Gadst, escrita y dirigida por Facundo Agrelo y cuya función se escenificó en la Escuela de Teatro de la ciudad de Guanare a las 7:00 p.m. ya entre los últimos más no por ello menos importantes eventos del XXIX Festival de Teatro de Occidente.

El impacto de la penetración tecnológica y los condicionamientos mediáticos constituyen el marco dentro del cual se desarrolla una historia absolutamente cotidiana apoyada en una clave de comedia para su construcción y en la cual el gesto marca el ritmo y las respuestas del espectador.

Un trabajo en el cual un texto muy sencillo es interpretado con niveles de calidad realmente admirables. La propuesta plástica pasa a un segundo plano, resultando simplemente apropiada para apoyar el trabajo que los histriones, en cuya expresión gestual, auténtica y precisa descansa todo el peso del espectáculo, muestra de un trabajo bien aplomado en la construcción de los personajes, cuya psicología y fuerza emocional trasciende a partir de este desempeño mucho más que por el movimiento o los parlamentos.

En resumen un espectáculo nada vanidoso pero de resultados exquisitos que la vitrina teatral de occidente ha puesto a nuestro alcance.

Inmediatamente nos trasladamos al centro teatral “Herman Lejter” para apreciar en segundas miradas los trabajos de España y Ecuador.

Así, a las 9:00 p.m. la sala Alberto Ravara recibió el espectáculo “Marat + Sade” texto de Peter Weiss en traducción de Alfonso Sastre, dirección de Miguel Ponce y presentado por el grupo Minimal Teatro, venido desde España.

Fue valioso el repetir la mirada sobre esta propuesta puesto que nos permite ahondar en la investigación y comprensión del trabajo planteado, en sus intenciones, concepto y condiciones de puesta y montaje.

De modo tal que iniciamos la comprensión de las razones estéticas que condicionan la puesta, que bien podría asumirse como un trabajo en construcción con acentuadas características de riesgo.

Mas allá del manejo del ritmo, las transiciones y la depuración estética pertinentes, se requiere sin duda altos índices de seguridad en la creación artística para confrontar al espectador con un espectáculo obviamente inacabado que a pesar de todo y fundamentalmente gracias a la honestidad de sus intérpretes y la riqueza del texto logra cautivar a la audiencia. Como conclusión podríamos afirmar que las formas de expresión artística son infinitas.

También en esta misma jornada volvimos la mirada sobre La revuelta de l@s idiotas, un trabajo que desde Ecuador se nos presentó en co-producción de Des acuerdo teatro y Teatro del Cronopio, un proceso de investigación creativa gestado e interpretado por Yasna Vivanco y Andrea Moreno con aportes y dirección de Guido Navarro.



Una propuesta audaz con plena unidad de sentido plástico y conceptual junto a desempeños actorales que evidencian dedicación y estudio de los procesos físico-emocionales y espirituales que atraviesan los personajes y en la cual se indaga en lo femenino como concepto de valor en un mundo profundamente machista, una valoración de la mujer a partir de la propia mujer, su cuerpo y psicología en una intención de liberación más que de competencia o igualdad frente a lo masculino.

Fue pertinente esta función que se efectuó en la sala Federico Collado a las 10:30 p.m. para poder acercarnos apropiadamente a este trabajo luego de lo sucedido en la función precedente en la carpa “Cacao”.

Finalmente, los espacios de La perra que llora, dieron cabida a la Noche de cuentos, canto y encanto con lo cual dimos cierre a la jornada.

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