El ensayo de la Señora Braun.


Tradición familiar llevada a extremos.

Cuando la tradición familiar es cumplida sin dar espacio a la reflexión y tiene por único objetivo satisfacer caprichos y conveniencias, sin duda su destino es la tragedia. Que si bien puede teñirse o no de sangre, no por ello deja de ser terrible.

Y es precisamente la tragedia el hilo invisible que sostiene cual macabras marionetas suspendidas del limbo, las almas en pena de Sara, Ana, Antonio y todos los que comparten la historia de esta conservadora familia. Sara Montes de Braun, repite una y otra vez el ensayo de la desgracia para su hija, pensando tan solo en satisfacer su propio ego.

El ensayo de la Señora Braun es la última producción de la Escuela de Teatro “José Antonio Páez” de Guanare, institución que al celebrar sus 47 años de fértil trayectoria, se renueva y rescata la razón de su génesis, ser el semillero de grandes talentos teatrales desde Guanare para toda Venezuela.

La pluma del dramaturgo Manuel Manzanilla nos entrega un texto limpio, elegante, coherentemente estructurado, que nos lleva a conocer la historia de una familia atrapada por la trampa de tradiciones familiares que lejos de asentarse sobre valores verdaderos se convierten en armas de manipulación para el logro de mezquinos propósitos y sobre todo la conquista del reconocimiento social por encima de cualquier ideal.

A este gran texto se le suma el desempeño de los histriones, profesores de la Escuela de Teatro, quienes asumen con la templanza requerida el compromiso de llevar a escena este trabajo. Personajes suspendidos en el limbo, voces que parecen surgir de un profundo abismo; todo un complejo trabajo de caracterización por tratarse de una situación carente de referentes en la realidad. Resulta si muy importante mejorar el trabajo de dicción en el personaje de Sara Braun porque sus imprecisiones desmontan el aire de arrogancia que ostenta el personaje.

La dirección, del propio Manuel Manzanilla, por su parte logra impactantes momentos con una plante de movimientos muy bien planificada y una escenografía carente de artificios pero con la fuerza expresiva suficiente para introducirnos sin consideraciones en el mundo tenebroso de la familia Braun Montes, todo esto apoyado por efectos de sonido muy bien logrados.

En resumen, una obra teatral que somete al espectador a un ambiente de fuerte presión emocional, trayendo de vuelta a la vida una serie de personajes en los cuales finalmente, podríamos retratarnos todos.

Esta función se llevó a cabo en la Sala Graciela Millán de la misma Escuela de Teatro “José Antonio Páez”, en los espacios del Centro de Bellas Artes de Guanare, el 13 de Julio del 2012 a las 6:30 p.m.

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